Caipiriña

          La caipiriña es una bebida que por sí sola habla sobre historia, sabor y cultura. En el siglo XIX, habían esclavos en Brasil, ellos tomaban “guarapa”, un jugo de caña de azúcar que obtenían prensando las cañas con un sistema de rueda, luego lo hervían para eliminar las bacterias y lo consumían sin fermentar. Mientras que las familias adineradas tomaban cachaça, popularmente conocida en méxico como caña, que se obtiene de la destilación del jugo de la caña de azúcar fermentado.
           Con el pasar del tiempo en las fiestas y rituales empezaron a mezclar su garapa con aguardiente local, combinandolas con el zumo de frutas o especias, antes conocida como “Batida”. En esos tiempos no tenían idea de la bebida emblemática que estaban creando.
         Con el tiempo, la batida de limão evolucionó pasando a llevar trozos de limón, dando la cáscara, un sabor particular a la bebida. El milagro se terminó de obrar cuando la tecnología permitió en 1835 la fabricación de hielo, convirtiéndose a partir de entonces en una bebida más refrescante, lo que la hizo aún más rica y popular.
            Actualmente la caipirinha es uno de los símbolos de Brasil, después de la independencia del país, empezaron la exportación de su cóctel que es mundialmente reconocido debido que no era considerado apenas un cóctel alcohólico si no un remedio contra la epidemia de gripe que asoló el país en 1918 y todo debido a sus propiedades particulares curativas.